Durante muchos años, los fisioterapeutas han trabajado junto con cirujanos ortopédicos y radiólogos como parte de un equipo multidisciplinar para el tratamiento de lesiones musculoesqueléticas (MUS), aunque últimamente su papel está cambiando.
Suresh Sudula, fisioterapeuta en Kent, utiliza ecógrafos en el punto de atención en el ámbito de la fisioterapia para ayudarle a realizar infiltraciones en el tejido blando, las articulaciones y la columna, así como para una serie de innovadores tratamientos para paliar el dolor musculoesquelético.
Suresh explica cómo puede explorar, diagnosticar y tratar un área problemática, a menudo en una sola cita, con lo que ofrece la oportunidad de vivir sin dolor a las personas que buscan su ayuda.
Desde el primer momento en que utilicé ecógrafos en el punto de atención para la fisioterapia MUS, supe que este era el camino a seguir en mi consulta y para la atención que podía ofrecer. Me impresionó la idea de poder llevarme una máquina a cualquier parte y ofrecer un nivel altísimo de información a un paciente y utilizar esa información para informarle de los planes de tratamiento.
Con los años, he establecido ecógrafos en el punto de atención para MUS en varios servicios del NHS (Servicio Nacional de Salud inglés) y ahora gestiono clínicas completamente privadas en Londres y Kent.
A menudo los pacientes vienen sin un diagnóstico confirmado y, en esos casos, puedo utilizar directamente los ecógrafos en el punto de atención para ver la estructura del área problemática y explicar claramente lo que está sucediendo. Es importante poder ofrecer a los pacientes esta tranquilidad de forma inmediata; quieren saber cuál es el problema exactamente y, a partir de ahí, podemos comentar opciones de tratamiento. Además de utilizar el ecógrafo en todas mis evaluaciones, tanto estáticas como dinámicas, también lo utilizo constantemente como ayuda para realizar infiltraciones, a menudo para algunos innovadores tratamientos que la comunidad MUS está empezando a prescribir.
Uno de estos tratamientos, que se empezó a usar en la última década, especialmente en Europa, es la utilización del plasma rico en plaquetas (PRP) para favorecer la cicatrización del tejido blando. En este procedimiento, primero se extraen 50 ml de sangre del propio paciente, esta se centrifuga para separar las plaquetas del resto de los componentes de la sangre y se inyecta el plasma concentrado de plaquetas en el área problemática. La teoría detrás de este tratamiento es acelerar la cicatrización natural inyectando plaquetas ricas en factores de crecimiento e implicadas en las fases clave de la cicatrización de heridas del área dañada. Lo usamos principalmente en tendinopatías crónicas, como codo de golfista o tenista, desgarros de grado I y pacientes con artritis. Este es un tratamiento popular, ya que a los pacientes se les inyectan factores que ya están presentes en su sangre.
Otro de estos innovadores tratamientos son las inyecciones de células madre. Este procedimiento mínimamente invasivo utiliza el tejido adiposo que se acumula en las caderas y el abdomen del paciente. Las células regenerativas, conocidas como células madre mesenquimales, se separan del tejido adiposo, se activan y se inyectan directamente en el área problemática del paciente con la ayuda de un ecógrafo. Al igual que con el PRP, el objetivo es acelerar las propiedades cicatrizantes naturales del cuerpo aportando más células regenerativas al área problemática, ya sean tendones, articulaciones, ligamentos o músculos. Cabe destacar que las personas a las que se proponen las inyecciones de PRP o células madre son sometidas a una rigurosa evaluación médica con el fin de garantizar que son apropiadas hemodinámicamente para el procedimiento.
En ambas técnicas se emplea la ayuda de un ecógrafo para realizar las inyecciones con el fin de garantizar que el tratamiento se aplique exactamente en el lugar necesario. Sin embargo, me resulta tan útil la información que obtengo de los ecógrafos en el punto de atención
que ahora realizo todas las infiltraciones con la ayuda de mi sistema Fujifilm SonoSite M-TURBO no solo para articulaciones (como hombros o codos) y tejido blando, sino incluso para rodillas y caderas. Si se puede mejorar la precisión y, por tanto, la eficacia de un procedimiento, no cabe ninguna duda que debes hacerlo.
Las ventajas de los ecógrafos en el punto de atención son indudables, y los profesionales paramédicos como yo, así como los médicos, están empezando a aprovechar los beneficios que aportan. Al realizar un programa de certificación superior en ecografía, los paramédicos mejorarán su propia práctica y el servicio que ofrecen. Al igual que con muchas prácticas clínicas avanzadas, es fundamental una supervisión y orientación continuadas, así como unas directrices clínicas sólidas acerca de su uso. Sin embargo, con la formación, las cualificaciones y la experiencia adecuadas es posible facilitar el camino hacia una vida sin dolor, que es el objetivo final de todos nuestros pacientes, y utilizar las ecografías nos ayuda a mejorar el diagnóstico y los tratamientos para que esta esperanza se convierta en una realidad.
Fuente: FujiFilm Sonosite
